Tokkô 30 agosto 2008

Basado en el manga de Touru Fujisawa.
Realizado por AIC y Group TAC. Emitido en 2006.

Ranmaru Shindou se ha graduado como agente de policía, y le han asignado a una división con encargos de dudosa utilidad. Se ve envuelto en incidentes que conllevan mucha sangre y cadáveres mutilados.
Esto le recuerda a una pesadilla recurrente, en la que aparece una mujer con una espada, quien le resulta muy familiar, en el escenario de la muerte de sus padres y muchas otras personas: un barrio ruinoso que tiene un enorme agujero en el suelo. Y de ahí salen demonios.
Pronto Shindou tendrá alguna relación con estos demonios, y con sus respectivos exterminadores, la división Tokkô.

Una especie de demonios en el primer episodio

Gráficos: 6
En general no está mal. El diseño de los personajes no termina de convencerme, y los demonios (aquí llamados Phantom) no son nada del otro mundo. Los efectos son bastante buenos.

Sonido: 6
Las voces japonesas están bastante conseguidas, excepto la de Shindou (Kenichi Suzumura: Lavi (D. Gray-Man) y Okita Sougo (Gintama)). ¡Es una voz más cómica que otra cosa! No puedo tomármela en serio.
Los efectos son normalitos tirando a buenos. Y la música, aunque adecuada, pasa desapercibida. El opening y el ending no tienen ningún sentido, pero son inevitablemente pegadizos.

Argumento: 8
El final es demasiado abierto, y quedan varias preguntas en el aire. (Sí, igual que con Loveless) Aunque los 13 episodios están bastante bien aprovechados.
En un principio es acción/gore contra demonios. Sin embargo hay una enorme tendencia a la intriga, y quizás a la ciencia-ficción. Casi se puede valorar mejor esta parte que los combates, que resultan demasiado rápidos.
Hay comedia, pero poquita.

jeje... los de Seguridad son muy amigos míos...

Personajes: 7
Como ya dije, diseños buenos hasta cierto punto. Al menos intentan innovar un poco con el pelo. Cuesta bastante definir a Shindou, pero su empeño por meterse en la boca del lobo puede resultar alarmante. El de carácter más complejo diría que es su jefe Kunikida, que parece un yakuza. Pero apuesto a que la más atrayente será Kureha, por lo despreocupada y erótica que puede llegar a ser.

Conclusión: 6,75
Historieta para adultos de héroes predestinados con un argumento relativamente complejo en 13 episodios. Los que busquen sangre, tetas y «acción invisible» no se sentirán defraudados. Sin embargo, recomendaría más Claymore. (Quizás otro día escriba sobre este anime, o lo haga otra persona)

Bonito tatuaje, ¿verdad? (En serio, hay un tatuaje)

Mai HiME 20 agosto 2008

Anime dirigido por Masakazu Obara.
Realizado por Sunrise. Emitido en 2004.

Tokiha Mai y su hermano Takumi están viajando hacia su nuevo instituto de secundaria. Por el camino en barco, sucede una brutal batalla entre una chica con traje de motera y pistolas muy cortas, y una niña con pinta de gato y una espada enorme. Acaban destrozando el barco, y Mai se despierta delante del instituto, rodeada de un círculo de fuego que aparentemente ha provocado ella. Enseguida conocerá a otras chicas con poderes parecidos (que además pueden invocar bestias poderosas), a las que llaman HiME (Highly-Advanced Materializing Equipment, o un acrónimo complicado para que en japonés signifique princesa).
Otro de esos animes de alta producción con un argumento de lo más completo que debería deleitar a todo tipo de públicos.

Gráficos: 9

Tanto los personajes como los escenarios y las bestias (aquí llamadas Childs) tienen unos diseños espectaculares. Las animaciones y los efectos pueden ser un pelín exagerados en algún momento, pero por lo demás son brillantes y bellos.
Sólo me quejo de que se centran exageradamente en los pechos de las heroínas. (Ya lo sé, como hombre heterosexual que soy, eso debería encantarme, pero tengo mis razones)

Sonido: 9

A pesar de la cantidad de personajes femeninos que hay, se pueden distinguir sus voces perfectamente. Los sonidos suelen estar bien, aunque a veces son un poco secos.
En la música ha colaborado la maestra Yuki Kajiura, así que tened algo de techno-ópera garantizada, entre otros temas emocionantes en la banda sonora. Y también está como dobladora mi querida Kikuko Inoue. ¡Kyahoo!

Argumento: 8

Al principio es bastante estúpido y demasiado ecchi. Sin embargo este ecchi tiene gracia, y mucha, alejándose bastante del tópico “chico torpe y tímido se cae encima de chica virgen”.
A partir del episodio 8, creo recordar, el hecho de ser HiMEs se vuelve importante, y da comienzo a una aventura interna, en la cual unos pocos hombres tratan de manejar a las pobres chicas como marionetas para cumplir uno de esos rituales para destruir el mundo. Aquí se entrecruzan drama, romance, honestidad y acción aprovechando bastante bien el tiempo. Más de uno se llevará alguna sorpresa, aunque quizás eche de menos algo más de acción.

Personajes: 8

Una chica trabajadora y siempre sonriente, una niña que se mueve como un gato y suele tener hambre (de la comida y las tetas de Mai), una anti-social que investiga más que asiste a clase, una decidida y mandona, una cariñosa e impasible, una inmadura celosa, una más crecidita pero escandalosa y con ganas de juerga, una ligona que se toma la justicia a su manera, etc. Al plantel de personalidades no le falta nada. (Y menos mal, porque no sólo actúan en esta serie)
Prácticamente todas las chicas están macizas. (Y esto se aprovecha en unos omakes bastante eróticos) Y también hay hombres, buenos y malos, pero a pesar de todo, no destacan tanto (salvo uno que es todo un caballero). … Me cuesta decidirme por un personaje favorito. @.@

Mikoto, la sobona

Conclusión: 8,5

No son chicas mágicas. Son chicas macizas de acción con magia. Así que no es (sólo) para quinceañeras que necesiten más Card Captor Sakura ni Sailor Moon. Es para quien quiera ver 26 episodios repletos de diversas emociones. Entre risas, llantos y suspiros, hay moraleja para todos.Y esta es la primera temporada. La segunda, Mai Otome HiME, la criticaré más tarde. (Acabo de terminar la primera, y la segunda la vi hace tiempo. Sí, me confundí. ^^u)
Lo único que no le recomiendo a las mujeres (heterosexuales) es que se miren los omakes (uno por episodio).

Muestra de un omake. (Niñas, no hagáis esto en casa)